Foro de Cibernautica

El sábado pasado estando distraido aqui con mis nietos en la playa de Riachuelo observé como unos 8 o 10 navegantes salieron corriendo de sus cómodas reposeras y abordaron 2 gomoncitos con motores chicos y un tracker con motor de unos 60/70 hp y partieron como los bomberos a rescatar un velero de 30 pies de La Plata con 1.80m de calado que garreó su fondeo en un inentendible descuido de su tripulación, que se encontraba a bordo, terminando del lado oeste de la chata hundida escorado y golpeando contra la tosca que hay en ese sector en medio de un SE de unos 12 a 15 kn.

Lamentablemente a mi edad no pude hacer mas que observar, los muchachos realizaron una maniobra excelente, el barco estaba con la proa apuntando a la costa, a pocos metros de la orilla, casi perdido. Ví como unos subieron al barco y le tiraron un cabo de proa al tracker, mientras los 2 gomoncitos con motores de no mas de 5 hp los usaron para guiarle la proa al mismo tracker para girar el barco remolcado hacia el lado del rio abierto. Despues de batallar un buen rato, lograron girar la proa y los de arriba escoraron el barco y asi lograron sacarlo. Fué una satisfacción ver la velocidad y coordinación de la maniobra, según me enteré la mayoria de los "rescatistas" eran amigos que se conocían de años de correr regatas.
Ayer martes, con la lluvia, reconocí a uno de los muchachos de uno de los gomones y le pregunté que habia pasado y me comentó que uno de sus amigos que abordaron el barco le contó que según dijo el dueño del barco "se distrajeron inflando el gomón" para bajar a la costa y se dieron cuenta tarde, también les llamó la atención que el barco no tenia botavara.

Pero a que viene el relato? a que en los viejos tiempos entre los nautas eramos agradecidos, a mi edad he visto varias situaciones de estas, sobre todo en la Barra de San Juan que mas de uno quedaba con el quillote al aire. En el caso de este 30 pies, que no doy su nombre ya que esto no se trata de un escrache, el agradecimiento fué de palabra solo con los muchachos que abordaron el barco ya que son los que lo guiaron hasta adentro del arroyo.
El muchacho del bote me decía que le hubiese gustado que al menos el propietario les agradeciera ya que arriesgaron y estropearon sus gomones guiando al tracker a los golpes, ya que si no iban ese barco terminaba en la playa, pero sin ningún rencor me decia, "no importa el dueño, yo fui a salvar al barco"...
Lamentablemente las viejas costumbres de al menos "agradecer" se van perdiendo tanto en tierra como en el agua, costumbres que hay que volver a sembrar...

Hasta la proxima!

Muy bueno y aparte terminó bien.
Es cierto que se fue perdiendo el espíritu de ayuda náutico con el paso de los años.
Por otro lado, que difícil es que el fondeo clave bien en la playa de Riachuelo. Estuve una tarde hace 10 días y tuve que levantar 5 veces por que garreaba la Danforth.

Cuando tiro fondeo frente a la playa en Riachuelo ni me relajo ni en pedo. Es re normal que garree y encima estas muuuuy cerca de la escollera por un lado y de la tosca por el otro. No es para joder.
Muy bien por los muchachos, y un verdadero inutil y maleducado el del velero.
Que bueno saber que el espiritu de ayudar al proximo en la nautica sigue intacto.

Que alegría saber que todavía hay navegantes solidarios y que además lo pudieron sacar.

Que pena lo del "capitán", lamentablemente actitudes como esas las veo cada vez más, un simple ejemplo es el saludo. Por más que no nos conozcamos en el agua se saluda, es más que una simple cortesía... pero bue, cada vez son más los que al saludarlos se hacen los no se que y te miran onda ¿te conozco?.

Saludos, Pablo A. Laffaye.

Una lástima que se vayan perdiendo aquellas costumbres con las que disfrutamos de la navegación cordial.
El saludo parece ser un caradurismo del que tiene la iniciativa. Es verdad. Algunos se quedan mirando como diciendo "Y a éste qué le pasa?. Quién lo conoce?"
Los tiempos van cambiando y las nuevas generaciones desconocen ciertos placeres genuinos de los navegantes mayores.
Estas descortesías también se notan al acercarse una embarcación a un muelle y que un comedido en tierra reciba el cabo y lo haga firme. Muchas veces ni las gracias.
En fín, así será el próximo milenio. Nada de gracias, ni por favor, etc.